Los parásitos, conocidos en Ayurveda como krumi, son molestos, generalizados y, a menudo, mal entendido. En este artículo vamos a considerar los mitos y realidades, tipos de parásito que se encuentra comúnmente, que pueden afectar la salud, la forma de hacer el diagnóstico, cómo esta condición puede ser manejada ayurvédicamente y cómo puede afectar a otros aspectos del tratamiento ayurvédico.

En Ayurveda, el concepto de krumi, muchas veces traducido como “gusano,” tiene implicaciones más amplias. Incluye a todos aquellos parásitos, ya sean bacterias, hongos o levaduras, accesibles a la visión sutil de los yoguis. Las plantas medicinales antihelmínticas también son útiles en estas condiciones. Son muy valiosas en el tratamiento de la infección producida por la levadura Cándida albicans, muy difundida, y para problemas relacionados a alergias y comidas. Las infecciones parasitarias son tratadas como Ama (toxinas, del mismo modo que la comida sin digerir que se estanca va a producir eventualmente algún tipo de parásito).

Si una persona no se recupera completamente después de un tratamiento, podemos suponer la presencia de parásitos. Los parásitos pueden realmente impedir la recuperación de cualquier enfermedad, sin que se manifieste algún síntoma evidente ó aparezcan en una muestra fecal.

Tal vez el parásito más común que afecta a las personas en este momento es la Giardia lamblia, un protozoo flagelado que puedan dar lugar a la giardiasis. Giardia puede existir en forma resistente, quiste latente que puede sobrevivir durante largos periodos de tiempo en el suelo o el agua, convertirse en activo y se reproduzcan una vez que entra en el cuerpo del anfitrión. Puede afectar tanto a humanos y animales y puede transmitirse fácilmente entre las especies. Mucho más virulenta, aunque menos común, es endamoeba histolytica que provoca la amibiasis. Se trata de una simple célula nucleada, que puede invadir el colon a través de las enzimas que secretan y que destruyen el tejido. La amibiasis es una de las causas de la muerte considerable y enfermedades a nivel mundial. Al igual que la giardia, e. histolytica puede sobrevivir fuera del cuerpo en forma de quiste que se activa cuando se ingiere.

La endamoeba hartmanii puede causar una infección subclínica en individuos susceptibles. Blastocystis hominis es un parásito común microscópico que puede sobrevivir en el cuerpo durante años y se cree que dan lugar a síntomas molestos de Blastocistosis en ciertos individuos.

La gente en muchos aspectos de la vida puede verse afectada por giardaisis. Los niños pequeños pueden pasar la enfermedad en todo, lo que resulta en muchos un pañal lleno de diarrea verde mocosa. Los gatos pueden contraer la enfermedad por comer ratones infectados, mientras que los perros que corren y juegan al aire libre también se pueden desarrollar la giardiasis. Los seres humanos que viven en estrecho contacto con sus mascotas y hacer frente a las heces de su animal puede exponerse a la infección, a menos que practicar una higiene estricta. Al beber de los arroyos infectados, que pueden aparecer claro como el cristal, que puede arruinar unas vacaciones en el desarrollo de diarrea acuosa. Por supuesto, también contaminan aún más la situación alces, ciervos y castores son ahora portadores de Giardia. Los pozos en zonas rurales o de montaña pueden estar contaminados por Giardia y los suministros de agua de la ciudad también se sospecha. Los comedores de sushi están en riesgo, ya que es muy poco inteligente consumir pescado crudo en un mundo donde se descarga aguas negras en los océanos contaminados. Las ensaladas que se comen en restaurantes de cadena, donde los cocineros de preparación están mal pagados y tienen poca educación también puede ser una fuente de infección. Y, por supuesto, viajar en países del Tercer Mundo aumenta el riesgo de giardiasis transmitidas por el agua.

La amibiasis es más frecuente en los viajeros del mundo, va en aumento de pacientes que al parecer desarrollan la enfermedad hepático amebiano por el suministro de agua de la ciudad en un pueblo. E. Histolytica está muy extendida en la India, México, América Latina, África y el Sudeste Asiático. Los viajeros que regresan de esos países con síntomas intestinales o con la energía baja se deben tomar muy en serio, ya que la amibiasis es una enfermedad muy peligrosa. Vale la pena señalar a este respecto que tanto la ameba y giardia puede permanecer en el cuerpo durante años en la forma de quiste latente. Ocultos en los lagos y de ahí en el parénquima hepático, o en los pliegues de los intestinos. Los parásitos más leves, como Blastocystis se transmite por situaciones similares. En los casos de enfermedad parasitaria, todos los miembros de la familia, humano, felino o canino, puede transmitir la infección a otros, por lo que todos deben ser considerados en riesgo.

Es frecuente que no se detecten parásitos en una examen de diagnostico normal. Por lo menos se requieren 10 exámenes en evacuaciones purgadas para encontrar un espécimen, debido a que los parásitos se incrustan firmemente en el intestino. También pueden alojarse en el cerebro, en el corazón, en los pulmones, en el hígado ó en los músculos, en cuyo caso será inútil un examen en heces fecales.

Marcus de Oliveira Teles, D. Ay. es Fundador, junto con su esposa, de Centro Ayurveda, un Centro de Sanación Integral con sede en las ciudades de Cuernavaca y México.Es considerado el Decano de Ayurveda en México