El shakuhachi (尺八? AFI: [ɕakɯhatɕi]) es una flauta japonesa que se sujeta verticalmente como una flauta dulce en lugar de como la tradicional flauta travesera. Era utilizada por los monjes de la secta Fuke Zen, seguidores del budismo zen, es su práctica ritual del Suizen (meditación mediante el soplado).
Definición
El nombre shakuhachi significa «1,8 pies», referido a su longitud. Se trata de una palabra compuesta por dos vocablos:
shaku (尺?) que es una medida de longitud arcaica usada en Japón, equivalente a 30,3 centímetros y subdivisible en diez fracciones denominadas sun.
hachi (八?), «ocho», referido aquí a ocho sun.
Así, «shaku-hachi» significa «un shaku con ocho» (equivalente a unos 55 centímetros), que es la longitud estándar de un shakuhachi. Otros shakuhachi varían su longitud desde aproximadamente 1,3 shaku hasta los 3,3 shaku (cuanto más largo es el shakuhachi, más grave es el sonido). Aunque los tamaños varien, todos son denominados genéricamente como «shakuhachi».
Dado que el shakuhachi es una flauta con solamente cinco orificios para la digitación, para producir muchos de los sonidos utilizados en la música de este instrumento, se requiere una combinación de coberturas parciales, cambios en la embocadura y en la emisión del aire.
Historia
Durante el periodo Nara (s. VIII) fue introducido como instrumento desde China hacia Japón. Al comienzo se utilizó para la música cortesana Gagaku.4A comienzos del periodo Edo, durante el siglo XVI, los komuso, grupo de monjes itinerantes de la secta Fuke, budistas Zen, desarrollaron una práctica de meditación sonora.
A esta práctica de meditación individual, que consistía en meditar mientras soplaban ciertos sonidos en un shakuhachi, la llamaron suizen. Los sonidos no eran improvisados y el objetivo de estos monjes Zen era llegar a la iluminación a través del sonido del shakuhachi. El shakuhachi no era considerado un instrumento musical, gakki, sino uno de práctica religiosa budista, hooki.
En 1871 este grupo de monjes fue proscripto y entonces el sonido del shakuhachi comenzó a ser transmitido en calidad de música con el nombre de música original, honkyoku.
Técnica
La flauta dulce se sopla a través de la boquilla, permitiendo un control limitado del tono. El shakuhachi se toca soplando el aire como si fuera el extremo del cuello de una botella, pero en su otro extremo, el shakuhachi termina en un borde afilado, que permite al intérprete un control sustancial sobre el tono.
Los 5 agujeros están afinados según una escala pentatónica, sin semitonos, aunque el intérprete puede modificar cada tono tanto como un tono o más utilizando técnicas llamadas meri y kari, para conseguir las cuales se modifica el ángulo de soplado, consiguiendo tonos más altos o más bajos, respectivamente. El shakuhachi permite un rango de dos octavas completas (la más grave se llama Otsu y la más aguda Kan) y una tercera octava incompleta (Tai-Kan). Las distintas octavas se consiguen mediante sutiles variaciones en la respiración y en la embocadura.
Al respecto dice Horacio Curti:
En la ejecución de esta forma musical, quizás debido al valor que el sonido poseía del sonido en la práctica que la originó, podemos observar de forma especialmente clara el modelo de ideal sonoro japonés; un ideal de sonido “nopuro”, que en este caso se expresa en la natural presencia del aire en el sonido producido con la flauta.
Es también este un espacio sonoro interesante para observar el valor del timbre, lo que se explicita en la existencia de varios sonidos con igual altura pero nombres diferentes. Si entendemos que el hecho de otorgar nombres diferentes a dos elementos es un signo claro de que “emicamente” estos elementos son considerados como cosas diferentes, entonces estamos frente a una información valiosa a la que podremos acceder si identificamos que es lo que diferencia a estos dos sonidos. Desde el punto de vista emic queda claro también que no estamos hablando de lo que en algunos instrumentos musicales es conocido como “digitaciones alternativas”, es decir alternativas de valor equivalente ofrecidas al intérprete para que este escoja en función de facilitar el movimiento de las manos o dedos para lograr mejores articulaciones de los sonidos.
Nos enfrentamos entonces a dos o más sonidos con igual altura pero diferente nombre y, debido a esto último, la sospecha de la existencia de alguna diferencia fundamental entre ellos. El timbre es aquello que los hace significativamente diferentes y es común que los intérpretes de shakuhachi se refieran a esto como una diferencia en “el espíritu” de los sonidos.
Fuente: Wikipedia